viernes, 22 de mayo de 2009

COMPLACENCIA DIVINA...‏


Qué impulso
es el que nos
guía y nos
apremia a
invadir otros
espacios en el
intento de
demostrar lo
que debería ser
irradiado a nuestro
paso?

El ego siempre pretende demostrar lo
engañoso de su perfil, necesita reflejos
de su existencia, porque no entiende de
silencios ni soledades....perecería en la
carencia de la muestra de su poder.

Cuando somos perseguidos y acosados
por luces ensombrecidas es porque en
realidad nuestra luz posee mayor fuerza,
su potencia se hace predominante en la
ausencia de nuestro Ser, rozando así las
susceptibilidades ajenas, que temerosas
vienen al ataque.

Y es que quién te daña no ejerce este poder
gratuitamente, siempre yace en la carencia
de su existir que difunde como una plaga,
el desahogo insaciable de su pobreza interna
ansiosa de nuevos alimentos para consolidar
ese engañoso subsistir.
Samsara

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